Como he hecho en otras ocasiones, antes de disponerme a escribir, he decidido estar en el epicentro de la marea roja para poder opinar. Y a mí, como a otras muchas personas, afortunadamente o no, no me toman el pelo.
No entro en valoraciones absurdas sobre el trabajo que llevan a cabo estos futbolistas, porque las utopías son imposibles de conseguir en este mundo. El fútbol en España es sagrado. Y punto. No hay nada más que añadir al respecto.
Y yo me pregunto, ante miles de personas vitoreando a los jugadores de la Selección Española, qué hago aquí. Ya que por muy aficionado que uno sea del "Deporte Rey", hay que ser consciente de la situación que nos gana terreno cada segundo. Pero no quiero dar lugar a confusiones, envidio la felicidad en cada rostro y alabo el espíritu esperanzador de cada persona con la que me crucé. Pero, un momento, estos jugadores son los mismos que han recibido una prima de 300.000 euros por haber ganado la Eurocopa. Y esto es o no criticable como todo en esta vida. Para mí, indignante.
Ya en su momento, la Selección Italiana aseguró que donaría su prima en caso de ganar la Eurocopa a los damnificados por el terremoto que afectó al norte de Italia.
No olvidemos que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte da una "ayuda" económica al fútbol. Ni tampoco olvidemos que los clubes de fútbol españoles deben a la Hacienda Pública 752 millones de euros. Sé que son datos un tanto inconexos, pero a lo que quiero llegar con todo esto, es que la situación actual es lo suficientemente delicada como para tomársela en serio. Y aquí no culpo a los jugadores. O al menos, no sólo a ellos.
España sale a la calle para celebrar el triplete. Muchos españoles creen que haber ganado la Eurocopa ayudará a empujar la crisis hacia otros caminos menos peliagudos. Pero, ¿a quién beneficiará esos 7 millones de euros que se han llevado? A ti desde luego que no. Ni tampoco a mí. Quizá muchos me digan que la prima ganada no es competencia del Gobierno o más concretamente, del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. No se trata de eso.
Hablan de la humildad de los jugadores, de su compromiso con la sociedad española. Hablan y hablan. Pero los hechos, dicen lo contrario. Mientras, los informativos siguen con minutos y minutos bañándonos con la gloria de una victoria que no veo real.
Sé que Iniesta ha donado los 300.000 euros a los damnificados por los incendios de Valencia. Un gesto admirable por su parte. Pero, puesto que son héroes, como muchos cuentan, podrían contribuir a la grave situación que se está viviendo a grito de "yo soy español, español, español".
Llevo días debatiendo de este tema con bastantes personas y cada vez lo encuentro más fascinante, tanto que se me queda corto el espacio de un blog para hablar de algo que merece mesa, mantel y sobremesa... Qué puedo decir, me encanta el debate...
ResponderEliminarTe felicito por dos cosas. La primera, por ir de nuevo al centro de lo que sucede. La segunda, por mencionar lo que para mí es de verdad criticable en este aspecto: el dinero que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte da a la Federación Española de Fútbol, un dinero que no necesita porque el fútbol es capaz de generar ingresos propios con contratos publicitarios y, en este caso, premios de la UEFA por el título.
Discrepo de tus conclusiones (pero, insisto, me parece fantástico leerlas para el debate), porque al final estos jugadores están haciendo su trabajo, y es un trabajo por el que sólo van a ganar dinero hasta los 35 años más o menos. A veces tengo la impresión de que no tenemos el mismo nivel de exigencia social para otros colectivos que ganan tanto o más dinero, que tampoco nos aplicamos a nosotros mismos el mismo rasero moral que les exigimos a ellos y que obviamos las obras sociales que hacen tanto el fútbol como los futbolistas (que existen, son abundantes, y no siempre publicitadas porque no todo el mundo quiere publicidad por esas cosas).
Para mí el fútbol, mi equipo y mi selección, es un sentimiento. No lo pongo ni un peldaño por debajo de eso. Y me hace feliz. Como a otras personas les hace felices la literatura, el cine, la música o lo que sea. Y ese detalle a veces tampoco se valora como creo que merece entre quienes no lo viven.
En todo caso, te repito, me encanta leer tu punto de vista.
Es un debate que suscita interés por ambas partes, por las que apoyan el fútbol y todo lo que ello conlleva y por los que no lo apoyan tanto. Sin lugar a dudas, me encanta tener diferentes puntos de vista para empaparme de información y de opiniones y así enriquecerme.
EliminarCreo que la clave de todo esto es el dinero que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte da a la Federación Española de Fútbol, precisamente por lo que comentas.
Respecto a las conlcusiones, sé que soy muy crítica especialmente con el fútbol, quizá porque es de lo que más se habla y de lo que más interesa e influye, en mayor o menor medida, a la sociedad española. Desconozco, he aquí mi error, las obras sociales que realizan muchos de los futbolistas. Pero el desproporcionado dinero que ganan, se puede extender a otros deportes como la fórmula 1, el tenis, el baloncesto... con la diferencia de que éstos no calan tanto en la sociedad, al menos no en la nuestra.
Me encanta que la gente tenga ese sentimiento del que hablas. Que un deporte haga feliz a una persona es indudablemente satisfactorio. Y más ahora...
Agradezco tu punto de vista, ya que esto es lo que de verdad vale para crecer como persona, el debate y las diversas opiniones.
Gracias. Un saludo.